jueves, 19 de junio de 2008

Empezando a aceptar.

Tengo la mente en blanco. No sé qué escribir últimamente. Si voy en el autobús y saco mi cuaderno y mi lápiz e intento escribir, las palabras se quedan en mis dedos, no quieren ser acariciadas por el grafito, creo que le tienen miedo; y no es para menos. Saben, igual de bien que lo sé yo, que en cuanto salgan, será en forma de lágrima, el dolor no les permitirá salir de otro modo.
Llegados a este punto, incluso temo seguir escribiendo esto, que no es más que una aclaración de lo que le pasa a mis ganas de escribir, que son inmensas, pero están presas rodeadas de espinas encargadas de gritar que si se atreven a materializarse en letras, en palabras, en frases con sentido, no pasará nada más a parte de que una herida se abrirá. No creo que me convenga.

Me he pasado algunos días, después de comprobar que no soy capaz de escribir lo que deseo, leyendo otros blog's, otras páginas de gente como yo, que escribe, y que siente su vida en la escritura, que vuelca su vida en cada una de sus metáforas, en cada signo de puntuación. Y eso provoca en mí pavor: ¿por qué es capaz la gente de escribir lo que siente con tanta claridad? ¿por qué son capaces incluso de meterse en la piel de personajes totalmente inventados por ellos y que les salga tan bien la jugada que tienen a un montón de
ciberlectores enganchados? He llegado a pensar incluso que no sirvo para esto. No recuerdo cuándo empecé a escribir mis relatos, pero no recuerdo ningún momento en que lo haya dejado.

Empiezo a ver la solución... tendría que
dejar salir eso que me está consumiendo por dentro, dejar de ponerle excusas. aunque empiece a sangran, es más fácil sanar una hemorragia externa que una interna, y eso hace tiempo que lo sé.

1 comentario:

Nacho Sánchez dijo...

No tengas prisa por escribir, ya sabes cómo va ésto; cuando no tienes ni papel ni boli las musas aparecen y cuando te sientas delante del pepal a ver que sale...nada de nada...
eso nos pasa a todos!

Ánimo y a seguir escribiendo!

gracias por la visita, tus palabras se agradecen!